jueves, 1 de noviembre de 2007

Somos diferentes, somos iguales


Aissa es negra. Yo soy blanca.
Li nació en Asia y tiene los ojos negros, pequeños y rasgados. Yo nací en Europa y tengo los ojos azules, grandes y con forma de almendra.
Laura vive en Buenos Aires, acentúa los verbos en la última sílaba y habla con sus amigos de "vos". Yo vivo en Madrid, me como las letras finales de las palabras y para mí eres "tú".
Armando vive en Perú, a los 14 años empezó a trabajar. Yo vivo en España y a los 25 sigo estudiando.
Gerik es polaco y no entiende una palabra de español. Yo soy española y no entiendo una palabra de polaco.
Saidi es de Senegal. Montó en un cayuco para recorrer durante días 1500 kilómetros hasta Canarias. Yo crucé el Atlántico en avión para ir a México. Un viaje de 11 horas, con dos comidas, dos películas, una manta para el frío y una almohada para estar más cómoda.


A Aissa se le pone la piel de gallina cuando viene frío de repente. A mí también.
Los ojos de Li brillan de emoción cuando se cruza con el chico al que quiere. Los míos también.
El acento porteño y el de Madrid se vuelven uno solo cuando Laura y yo susurramos canciones de Ismael.
La madre de Armando lleva años limpiando casas en Madrid para darle una vida mejor. Mi madre lleva años limpiando casas en Madrid para darme una vida mejor.
Gerik no sabe español pero me dijo "lo siento" con la mirada cuando nos chocamos en la calle. Yo no sé polaco pero le dije "no es nada" con una sonrisa.
Saidi y yo compartimos sueños: conocer mundo, enamorarnos, tener una casa propia, ver felices a los que nos rodean. Los míos quizá se cumplan. Los de Saidi se ahogaron en el mar con él.

*Foto de Tania Fernández Buendía www.civilia.es

No hay comentarios: