Hace unos 15 millones de años, según dicen los entendidos, un huevo incandescente estalló en medio de la nada y dio nacimiento a los cielos y a las estrellas y a los mundos. Hace unos 4.000 o 4.500 millones de años, años más años menos, la primera célula bebió el caldo del mar, y le gustó, y se duplicó para tener a quien convidar el trago. Hace unos dos millones de años, la mujer y el hombre, casi monos, se irguieron sobre sus patas y alzaron los brazos y se entraron, y por primera vez tuvieron la alegría y el pánico de verse, cara a cara, mientras estaban en eso. Hace unos 450 mil años, la mujer y el hombre frotaron dos piedras y encendieron el primer fuego, que los ayudo a defenderse del invierno. Hace unos 300 mil años, la mujer y el hombre se dijeron las primeras palabras y creyeron que podían entenderse. Y en eso estamos, todavía: queriendo ser dos, muertos de miedo, muertos de frío, buscando palabras...
Eduardo Galeano
5 comentarios:
Me ha gustado esa reflexión, en eso estamos. El otro día leía en El País que, según un psicólogo y sexólogo, "el ser humano es polígamo por naturaleza y monógamo por vocación". Quizás es eso, que en la variedad está el gusto, aunque también está la inestabilidad e inseguridad, que nada, en eso estamos, je.
besos!
Palabras más o menos las que hoy me duelen, palabras más o menos, sentimientos ajenos.
uy uy... esto me suena a canción :P te pondré el lso agradecimeuntos del próximo disco
¿Dónde andas? Que se te echa de menos por estos lares... ;)
ya estoy de vuelta. Muerta de frío, muerta de miedo, buscando palabras... en eso estoy.
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